En una década, el número de organizaciones no gubernamentales (ONG) en Bolivia experimentó una drástica caída, y es que de casi 2.000 que había registradas en 2015, en la actualidad apenas pasan las dos centenas.
Según el Informe sobre Libertades e Institucionalidad en Bolivia 2024, del Observatorio de Defensoras y Defensores de Derechos de UNITAS, en 2015 se registraban 1.980 organizaciones registradas. En la actualidad, hay 206, lo que representa una disminución del 89.6%.
El reporte también refleja la disminución de ONG internacionales, las cuales pasaron de 185 registradas en 2015 a 44 registradas en 2025, lo que representa una caída del 76%.
El informe se respalda en datos del registro de ONG que realiza el Viceministerio de Inversión Pública y Financiamiento Externo.
La problemática por la que atraviesan las ONG en Bolivia en los últimos años, de acuerdo a un boletín oficial, abarca diferentes ámbitos, como la independencia, afectada por presiones tales como “vigilancia, acoso burocrático y financiero, o la estigmatización”. Así también la falta de acceso a la información y recursos.
Se cita, además, que el derecho a la libre asociación está “condicionado por obstáculos normativos y administrativos”. “Se denunciaron trabas arbitrarias en la regulación de organizaciones críticas, así como la asignación discrecional de recursos públicos, favoreciendo a sectores afines al gobierno”, cita la nota de prensa.
En sus recomendaciones, se exhorta al Estado a garantizar la plena vigencia de la libertad de asociación, respetando la independencia de las organizaciones, simplificando los trámites administrativos y evitando cualquier forma de injerencia.
